La actriz Marisa Paredes ha fallecido hoy a los 78 años. La que fuera presidenta de la Academia de Cine, que recibió un Goya de Honor en 2018, fue una de las actrices más consagradas y legendarias del cine español.
Nacida en Madrid el 3 de abril de 1946 también desarrolló su carrera en países como Francia, México e Italia, con más de 75 películas a sus espaldas también actuó en teatro y trabajó con los directores más importantes a nivel europeo.
La consagración de su carrera llegó en los años 90 cuando se convirtió en chica Almodóvar, con papeles en Entre tinieblas (1983), Tacones lejanos (1991) o La flor de mi secreto (1995). Pero no fueron esas las únicas colaboraciones con el manchego, también apareció en Todo sobre mi madre, Hable con ella o La piel que habito.
Del 2000 al 2003 fue presidenta de la Academia de Cine. Trabajó de igual manera en películas reconocidas a nivel europeo como La vida es bella, El coronel no tiene quién le escriba o El espinazo del diablo de Guillermo del Toro y se batió el cobre con figuras tan míticas y diversas como Arturo Ripstein o Marcello Mastroianni.
Por su trabajo ganó numerosos premios: el Premio Nacional de Cinematografía, la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes, la Gran Medalla Verme ilde la Villa de París, el Fotograma de Plata en seis ocasiones, el Premio de Honor en el Festival de Cine de Astorga y el Premio Goya de Honor, entre muchos otros.
