El número 7 de la calle Marcos Zapata, en El Palo, siempre ha generado la duda de haber sido la vivienda en la que habitó el músico malagueño Eduardo Ocón. Lo que está claro es que estamos ante un claro ejemplo de la arquitectura del siglo XIX que este viernes ha comenzado a ser derribada.
En la biografía de Ocón se destaca que vivió junto a la torre de la Catedral. Sin embargo, siempre se ha hablado de esta vivienda recién derribada con el fondo del monte de San Antón y la playa de El Palo a sus pies. La villa de 2.800 metros de huerta, palmeras y verde se ha despedido de la ciudad, sea o no aquel lugar de retiro del director del primer conservatorio de Málaga.
No es la primera villa derribada en la capital malagueña. Hace cerca de dos años le tocó el turno a La Atalaya, en Salvador Rueda. El Ayuntamiento, en principio, la incluyó en el expediente para estudiar su protección, pero no se cumplían los requisitos para formar parte del Plan General.