España es el país de las eternas comparaciones. Este domingo Carlos Sainz Jr. ha ganado en Silverstone su primer gran premio de Fórmula 1. Ha tenido que pasar casi una década para que otro español se suba a lo más alto de podio y descorche la gran botella de champán.
Fernando Alonso ganó su última carrera en mayo de 2013, nueve años sin obtener un triunfo en la máxima competición. Alonso se vincula al pasado y Sainz al presente y al futuro. Son e´pocas distintas y pilotos diferentes.
El tenis también nos sitúa ante otra presunta ‘operación relevo’ aunque con domingo incierto. Carlos Alcaraz, ‘Carlitos’, pese a que el murciano no le guste el diminutivo, se ha despedido de Wimbledon con una derrota ante el italiano Sinner.
La diferencia es que Nadal no es Alonso. El tenista balear gana y sigue ganando pese a sus dolencias físicas. Alcaraz es futuro y Nadal sigue siendo presente.
Carlos Sainz, Fernando Alonso, Carlos Alcaraz y Rafa Nadal tienen vida propia. Sainz y Alonso no corren entre ellos y Nadal y Alcaraz se han convertido en dos activos del tenis español. La llegada de los jóvenes talantos no se traduce en el final de los veteranos. Este domingo se han vivido historias británicas – Silverstone y Wimbledon- con protagonistas españoles.
