La agenda de Fran Perea (Málaga, 1978) siempre está repleta de proyectos, por lo que la pandemia le pilló componiendo. Pero la situación le hizo parar en seco para recapacitar sobre lo que estábamos viviendo durante el confinamiento.
Una vez concluida la primera ola, su guitarra comenzó a esculpir los acordes de lo que ahora es su sexto trabajo discográfico, ‘Canciones para salvarme’, un EP de cuatro temas que surgieron “de una revelación”, como él mismo explica: “La cultura sana y nos ha librado de caer en una tristeza profunda en estos meses”.
En sus nuevos temas, Perea llama la atención sobre la importancia de la música en nuestras vidas (‘Canciones para salvarme’) y realiza guiños a la creación cinematográfica (‘Cantando bajo la luna’).
La obsesión de estos días por tener controlada la temperatura corporal (‘37 grados’) y la capacidad de resiliencia del ser humano (‘El Norte’) han sido otras de las inspiraciones del malagueño, que el próximo 20 de febrero acudirá al Teatro Las Lagunas de Mijas con su nueva gira de conciertos.
P- ¿Cómo está viviendo la buenísima acogida de su nuevo trabajo?
R- Estoy muy contento. Uno va haciendo cosas, y aunque unas obtienen más resonancia y otras menos, creo que ese el es camino. Estoy contento porque ‘Canciones para salvarme’ es un proyecto que surge de una necesidad y de un momento concreto. La expresión artística tiene que estar pegada a la vida y el hecho de que estas canciones estén siendo bien aceptadas quiere decir que uno está conectado con lo que pasa y con lo que gente la piensa. Y eso es siempre muy gratificante y satisfactorio.
P- ¿Son estos temas el resultado el confinamiento?
R- Empecé a escribirlos justo después. Durante el confinamiento no me salía componer, pero cuando empezamos a salir comencé a pensar en todo lo que habíamos vivido y en cómo la música y la cultura nos ha servido para afrontar esta situación. Por eso me decidí a escribir ‘Canciones para salvarme’, una canción que quiere ser un homenaje a todos esos grandes músicos que tenemos.
“Ahora los conciertos son una experiencia muy distinta, pero también muy emocionante”.
P-En esa canción piropea con nombre y apellidos a muchos cantantes y grupos que ha sido fundamentales en su vida. ¿Cree que la música tiene la capacidad de salvarnos?
R- En la canción nombro a muchos músicos que han sido importantes en mi vida y también a otros que considero que son esenciales. Tendría que haber muchos más, pero no podía citarlos a todos porque sino se hubiera convertido en un listado casi infinito. Creo que la música tiene esa capacidad. Es una tabla de salvación que te hace ponerte en un sitio o en un sentimiento que después se convierte en un motor que te cambia. Y ese cambio puede salvarte, claro.
P-La cantidad de cantantes malagueños a los que menciona es alta: Pablo López, El Kanka, La Mari, Vanesa Martín, Pablo Alborán… ¿Barriendo para casa?
R- Bueno, no soy muy de enarbolar banderas, porque creo que todos somos ciudadanos del mundo. Pero sí me siento muy orgulloso de pertenecer a esta tierra donde hay músicos tan talentosos.
P- En el tema ‘Cantando bajo la luna’, en el que imagina qué diría un extraterrestre si pudiera observar cómo somos los humanos, también hay referencias al cine, otra tabla de salvación durante la cuarentena.
R- Sí. El cine ha estado también muy presente en esos días. Y la idea viene de una charla con Georgina en la que imaginamos qué pensaría un extraterrestre de los humanos, que por un lado somos capaces de hacer películas tan maravillosas, en las que la vida parece tan fácil, y luego nos comportarnos como nos comportamos.
Me siento muy orgulloso de pertenecer a esta tierra donde hay músicos tan talentosos
P- El próximo 5 de febrero arranca una nueva gira en Córdoba que le traerá al Teatro de Las Lagunas de Mijas el 20 de febrero. ¿Cómo se plantea la preparación de una gira de conciertos que podría fácilmente cancelarse?
R- Pues con más trabajo y más responsabilidad. En el caso de cancelación hay que informar a todo el mundo y hay que devolver el importe de las entradas. En esta profesión siempre hay un alto componente de inestabilidad. Siempre digo que hasta que uno no esté sobre el escenario puede pasar cualquier cosa. Y ahora esa inestabilidad es más alta. Claro que estaría más cómodo si me quedase en casa hasta octubre, pero no podría. Y también hay un mayor componente de responsabilidad porque hay que cuidar la salud de las personas por encima de todo y tomar todas las medidas necesarias para ello.
P- Los conciertos en estos días son una experiencia muy distinta a la que solía ser. ¿Cómo los vive desde el escenario?
R- Es cierto que son más íntimos y más comedidos, porque el público no se puede poner a cantar como loco como lo hacía antes. Pero por otro lado son conciertos muy agradecidos y se observa una luz muy especial en los ojos de esas personas que llevaban mucho tiempo sin acudir a un directo y vuelven a disfrutar de la música en directo. Sí que son una experiencia diferente, pero en algunos de los conciertos que he dado después del confinamiento he vivido momentos muy emocionantes.
P- Lo que ha quedado claro es que las salas de conciertos o el cine son lugares seguros.
R- Totalmente. El sector de la cultura ha realizado un esfuerzo enorme para adaptarse a la nueva situación e implementar las medidas sanitarias necesarias. En el ámbito cultural no se ha producido ningún brote hasta ahora, por lo que podemos decir que la cultura es segura.
Cuando llegan las mal dadas, lo primero que se hace es recortar en los presupuestos de cultura.
P- Tanto su disco como la nueva serie de Antonio Banderas, ‘Escena en blanco y negro’, llaman la atención sobre la importancia de la cultura en nuestras vidas, algo que se ha podido constatar durante la pandemia. ¿Cree que, una vez que acabe esto, le daremos el valor que corresponde a la música, el cine, la literatura…?
R- A mí me gustaría que sí, aunque desgraciadamente estamos a años luz de contar con unas instituciones que estén a la altura de nuestro patrimonio cultural. Cuando llegan las mal dadas, lo primero que se hace es recortar en los presupuestos de cultura. Y eso es una pena porque de esta manera se está mandando el mensaje a la gente de que la cultura no es importante. En nuestro país, desgraciadamente, no ha llegado esa conciencia sobre la importancia de nuestra cultura ni el apoyo necesario.
P- Además de la música, tiene otros proyectos televisivos y teatrales por delante.
R- Sí, estamos a la espera de las noticias de Netflix sobre el estreno de la segunda temporada de ‘El vecino’. Por otro lado, la primera temporada de ‘Kosta’ ha ido muy bien y han sonado campanas de hacer una segunda, aunque todavía no hay confirmación. Ojalá se pueda confirmar pronto. El próximo 27 de enero estreno la dirección de ‘Los últimos’, un texto de Carlos Zamarriego protagonizado por Ángel Velasco, en el ciclo de Teatro Confinado de La Abadía. El 27 de marzo volvemos a la carretera con ‘Mitad del mundo’, que reestrenamos en Madrid, y todo apunta a que en primavera también recuperaremos ‘El ciclista utópico’.
