Conseguir un test de antígenos es una misión casi imposible en muchas farmacias de la provincia de Málaga. Casi diariamente reciben estas pruebas de autodiagnóstico y en muchos casos se agotan en pocas horas. Una avalancha de peticiones y de ventas de unos test cuyo precio se ha elevado en las últimas dos semanas, coincidiendo con la sexta ola y el incremento de contagios de COVID-19.
Según el Colegio de Framacéuticos de Málaga, el precio se ha elevado porque viene ‘prácticamente doblado’ de origen debido a esta gran demanda. Es decir, las suministradoras han incrementado el precio que deben pagar las farmacias y repercute en los usuarios.
Aquellas personas que se hagan un test de antígenos en casa y den positivo deben comunicarlo al Servicio Andaluz de Salud (SAS) bien a través de alguno de los canales de comunicación de Salud Responde o a través de la farmacia donde se adquirió la prueba.
Hay familias que desean hacerse un test antes de las reuniones y por ello la demanda es más elevada, como una medida de prevención.