Los 212 diputados que dejarán de serlo a partir de las 00:00 horas de este martes, cuando se haga efectiva la disolución del Congreso, podrán cobrar una indemnización de transición en un pago único siempre que no tengan otros ingresos.
A falta de un acuerdo expreso de la Mesa del Congreso la previsión es que esa cantidad corresponda a 52 días de sueldo como en anteriores legislaturas y oscilaría entre los 6.800 y los casi 9.000 euros, en función de los complementos.
Se trata, en concreto, de los 212 parlamentarios que no forman parte de la Diputación Permanente, el único órgano de la Cámara que seguirá existiendo hasta la constitución del nuevo Congreso que surja de las elecciones del 23 de julio y que está formado por 137 personas entre titulares y suplentes.