ASUFIN exige que las entidades cumplan con el carácter esencial de los servicios bancarios y proporcionen un trato personal y adecuado, conforme a las necesidades de los usuarios.
Los movimientos de concentración bancaria y la extrema velocidad con la se está digitalizando el sector está dejando atrás a un buen número de ciudadanos, y en especial, a las personas mayores, que representan un tercio de la población del país.
En ese sentido, ASUFIN apoya públicamente la campaña iniciada en la plataforma Change.org por Carlos San Juan y que pone cara y voz a una reivindicación justa por parte de un colectivo que se está viendo expulsado del sistema financiero. Patricia Suárez, presidenta de ASUFIN, viene defendiendo públicamente “una digitalización de las finanzas a dos velocidades que no genere exclusión financiera”.
Hay que recordar que los servicios financieros, como otros muchos, como el sanitario, por ejemplo, tienen un carácter esencial y que los consumidores necesitan medios adecuados para poder gestionar sus economías domésticas. No podemos permitir que la población mayor, al igual que otros colectivos, se vea excluidos.
Según los datos recabados por ASUFIN, en su último Estudio sobre Hábitos y Conocimientos Fintech en España, apenas un 2,7% de la población mayor de 65 años, ha usado los servicios de las compañías financieras tecnológicas, las conocidas como Fintech, frente a casi el 30% que se registra en los tramos de edad de la población más joven.
