Jorge Díaz era un motociclista profesional que tras una gravísima caída, que le acuñó dos vértebras lumbares y le seccionó parcialmente la médula, se vio obligado a retirarse. Los médicos le dijeron que nunca volvería a caminar.
Tras semanas postrado en cama, comenzó a trabajar aspectos de la mente que hasta entonces le eran desconocidos y que le sacarían de la situación de inmovilidad en la que se encontraba. Volvió a caminar, a subirse a una moto y a ganar una carrera.
Después de su retirada como profesional, ha dedicado los últimos 15 años al estudio de la Metafísica, Mecánica Cuántica, Neurociencia, Biología celular, Bioneuroemoción, Espiritualidad, con el desarrollo de la meditación como herramienta fundamental para la fusión de todo ello.
El 13 de abril salió a la venta ‘Incubadora consciente’ (Última Línea, Málaga), un libro que al autor le gusta más llamarlo método/transformación.
Tu ejemplo es una experiencia de superación. Eres valiente porque además has asumido públicamente que pasaste por una depresión debido al accidente y ver que no te recuperabas. ¿Por qué sigue siendo un tabú reconocer que se tiene una depresión?
No me considero una persona diferente a los demás, por esto me afectan las mismas situaciones que puedan producir estados como puede ser la depresión.
Debido a la situación en la que me encontraba después del accidente y viendo que los días, semanas e incluso meses, pasaban y no evoluciona favorablemente mi estado, poco a poco fui perdiendo la fe, esperanza e ilusión, lo que sin remedio me llevó a un estado depresivo.
Esto también fue producido por mi desconocimiento de las que posteriormente se convirtieron en mis herramientas de sanación como bien explico en el método/transformación ‘Incubadora Consciente’.
Al comenzar a utilizar la información y aplicar todo el conocimiento que durante siglos se ha estado utilizando por los grandes maestros metafísicos como pueden ser Jesús de Nazaret o Siddharta el Buda, comenzó una evolución/recuperación que puede catalogarse de milagrosa.
El mundo de la alta competición, me ha enseñado a nunca rendirme y jamás tirar la toalla ante ninguna situación, por muy adversa que esta pueda ser. Esto no quita que haya momentos en los que la mente/ego te jugara alguna mala pasada y temporalmente experimentara un estado depresivo que fue transitorio.
El mundo de la alta competición, me ha enseñado a nunca rendirme ante ninguna situación, por muy adversa que esta pueda ser»
Llega un momento en el que dices “¡basta!” y decides salir adelante. ¿Cómo llegaste a ese punto de inflexión?
Ese momento existió como bien dices, y llega cuando me veo que estoy perdiendo la fe y la confianza en mí mismo. Como te dije antes, el mundo de la alta competición te enseña a sobreponerse rápidamente ante cualquier lesión o contratiempo, claro estaba que esto era muy diferente y más grave a cualquier otra lesión que hubiera tenido anteriormente.
Este momento llega cuando con la ayuda de un componente de mi equipo de competición me visita en el hospital y comienza a tratar mi emocionalidad.
Este ser milagroso que aparece en la que era una pésima situación en mi vida, era el coach psicológico que teníamos en el equipo de competición al que yo pertenecía y que enterado de mi situación física y mental decidió visitarme asiduamente para ayudarme con su grandiosa y maravillosa experiencia.
Recurso que me invitó, o casi me exige [risas], que saliera de la situación o estado mental en el que me encontraba si quería volver a caminar algún día en mi vida.
Me abrió un mundo nuevo y lleno de posibilidades a través de nueva información y conocimientos que para mí por aquel entonces eran totalmente desconocidos. Esto produjo en mí una ilusión, pero sobre todo abrió una puerta a la esperanza y de luz que hasta hoy guía mi vida.
Al estar postrado en una cama de hospital sin poder levantarme, contaba con todo el tiempo del mundo que invertí para aprender, memorizar y aplicar todo un conocimiento con el que se crea el método/transformación»
Me introdujo en el mundo del conocimiento metafísico, de la física cuántica, de la neurociencia y sobre todo de la espiritualidad.
A través de diferentes libros, seminarios que veía durante cientos de horas, talleres y mentorías, posteriormente con los mejores mentores tanto de las ramas científicas, epigenéticas, neurocientíficas… en pocos días empecé a ver resultados espectaculares.
Dada mi situación al estar postrado en una cama de hospital sin poder levantarme, contaba con todo el tiempo del mundo que invertí y canalicé para aprender, memorizar, insertar, pero sobre todo aplicar todo ese conocimiento con el que se crea el método/transformación.
Hablas mucho de que si piensas en algo positivo, alcanzas algo positivo. La conocida ley de atracción. En las redes sociales ha habido casos polémicos de enfermos de cáncer que decían que lo iban a superar porque querían vivir. Después ha habido desenlaces fatales. ¿Qué diría al respecto?
Nosotros como seres de luz encarnados en un cuerpo físico estamos regidos por leyes terrenales o humanas, las leyes de hombres para hombres a las que todos independientemente del continente, país o ciudad a la que pertenezcamos debemos acatar.
Pero al ser seres de luz encarnados y proceder de una fuente de energía, Dios, Divinidad, campo cuántico, universo… como cada uno lo quiera llamar, está perfecto y es respetable cualquier tipo de preferencia u opción que cada uno elijamos y nos sintamos identificados sin tener que juzgarnos los unos a los otros, cada cual que decida en lo que quiere creer, porque esto es totalmente respetable, o por lo menos así debería ser estamos regidos por leyes universales.
Leyes de hombres para hombres aquí en la tierra, y leyes universales que funcionan para todo y sobre todo para todos por igual. Estas leyes universales en las que se encuentra la ley de atracción necesitan de su saber para utilizarla.
Seguramente todos o casi todos estamos al tanto o conocemos bien las leyes de nuestra ciudad o país de residencia, leyes cívicas, de conducta y civilización. Y el desconocimiento de estas leyes no te exime de su cumplimiento. Pues esto mismo es lo que ocurre con las leyes universales, la gente ya sabe que existen pero desconocen cómo hacer que su funcionamiento les favorezca.
Lo que sí te puedo garantizar, no yo, sino la física cuántica, metafísica y mecánica cuántica, es que la ley de atracción funciona por, para y en nosotros 24/7 365 días al año.
Es importantísimo entender bien la mecánica de cómo funciona esta ley y todas las demás, para así poder utilizarla siempre a nuestro favor y esto lo explico al detalle en el método/transformación ‘Incubadora Consciente’, el método que está cambiando la vida de cientos de personas en todo el mundo.
De nada sirve escuchar música u oraciones sobre la riqueza económica si pienso que el dinero es sucio o que solo lo posee gente corrupta»
En tu libro hablas de que la consciencia no solo ayuda a cuestiones de salud sino incluso a aspectos económicos. En YouTube hay muchos vídeos sobre músicas que atraen dinero, y fórmulas ‘mágicas’ para atraer dinero como repetir ciertas frases en presente (no en futuro) de qué suerte tengo por tener dinero. ¿Esto realmente funciona?
Sí, sí, por supuesto que funciona. Ya lo dijo Buda hace 3.000 años, “te conviertes en lo que piensas la mayor parte de tu tiempo, somos el resultado de nuestros pensamientos”.
Tener una consciencia de abundancia y prosperidad atrae por resonancia una vibración igual, pero lo mismo sucede si tenemos una consciencia de carencia o escasez con respecto a algún factor de nuestra vida, atraemos lo mismo en lo que estamos vibrando. Por esto trabajar nuestro estado de consciencia en fundamental para indicar al universo, fuente de energía, Divinidad, Dios… aquello que queremos conseguir.
Entender cómo comunicarnos, orar y pedir al universo es la clave para la obtención de nuestros deseos y anhelos.
Por otra parte, creer que escuchando ciertas músicas o visualizando de esta o aquella manera solamente sin trabajar nuestras creencias es engañarse a uno mismo.
Orar, pedir, pero sobre todo sentirse en la emoción del deseo ya cumplido, nos mantiene en la creencia y la fe de que se hace realidad nuestra petición.
Primero se trabajan nuestras creencias y pensamientos para que estos unidos a la visualización, la oración en meditación y más herramientas complementarias hagan el resto.
De nada sirve escuchar música u oraciones sobre la riqueza económica si pienso que el dinero es sucio o que solo lo posee gente corrupta.
Supongo que entonces aspira a que su libro sea un bestseller. Si lo piensa, la ley de atracción lo conseguirá. ¿No es así?
El método/transformación ‘Incubadora Consciente’ ya posee toda la energía y vibración necesarias para llegar a todo aquel que sienta su llamado. Y estoy seguro de que llegará a muchas personas, como ya está haciendo desde hace tiempo el curso on-line que tiene el mismo nombre. Estoy absolutamente seguro que lo que en él se expone resuena con millones de personas que anhelan un cambio en sus vidas y esta metodología cumple con todos los requisitos para satisfacer esta voluntad en la gente, y todo este conocimiento e información unido a la ley de atracción garantizan su propósito.
