El reestreno de Pellicer en La Rosaleda ha sido muy-muy deficiente. Derrota ante el Real Oviedo sin generar ni una sola ocasión de gol. La afición, como siempre, ha tenido un comportamiento ejemplar: apoyo durante el encuentro y críticas justificadas al final del choque.
El grito de ‘Esta camiseta no la merecéis’ es un recordatorio a la plantilla de futbolistas. El Málaga es un equipo con historia, con currículum, y quizá los propios jugadores desconocen que en el campo de La Rosaleda confluyen sentimientos y recuerdos de temporadas y resultados gloriosos.
El Oviedo ha sido muy superior al Málaga durante los 96 minutos que ha durado el encuentro. Ha sido un equipo, muy bien dirigido por Álvaro Cervera, ante una suma de individualidades que Pellicer no ha sabido transformar en colectivo.
Pellicer no ha mejorado a Mel. El Málaga continúa generando una impronta de impotencia ofensiva que le condena al descenso. Lo de esta noche no ha sido una derrota. El equipo está ‘groggy’, tumbado sobre la lona. Ya ha perdido a puntos. Esperemos que no llegue el KO.
