«Es su decisión». Así se ha expresado Mark Bullingham, presidente de la Federación Inglesa, al ser cuestionado sobre Sarina Wiegman, entrenadora de la selección femenina de Inglaterra, y un posible futuro de la técnica en el banquillo del combinado masculino.
La neerlandesa, que tiene contrato con la FA hasta 2025, se convirtió este miércoles en la primera persona —hombre o mujer— en llevar a dos selecciones nacionales distintas a una final. Lo hizo en 2019, en el Mundial de Francia, cuando dirigía a Países Bajos. Y lo ha vuelto a hacer en esta Copa del Mundo con Inglaterra.
Su gran éxito al frente del combinado nacional británico femenino y la cercanía del fin del contrato de Gareth Southgate en la sección masculina —tras la Eurocopa de 2024— ha provocado que una cuestión empiece a cobrar cada vez más fuerza: ¿podría Wiegman sustituir a Southgate?
Hasta que se decida el banquillo de la selección masculina, la Federación Inglesa tiene claro que no quiere perder a la neerlandesa, elegida mejor entrenadora del mundo en 2017, 2020 y 2022, y ya ha iniciado conversaciones para prolongar su contrato.