Unicaja Banco ha ofrecido a los sindicatos una nueva propuesta del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que pretende llevar a cabo la entidad tras su fusión con Liberbank, que aún dista de lo que desean las centrales, en una negociación contrarreloj en la que solo disponen de tres días para alcanzar un acuerdo.
La entidad pretende el cierre de 395 oficinas y dar de baja a casi 2.700 empleados dado que a los 1.513 despidos contemplados en el ERE se suman unas 1.200 prejubilaciones, 730 que estaban en excedencia en Liberbank y 437 de la antigua Unicaja Banco, con los que se ha alcanzado un acuerdo.
Asegura CCOO que la propuesta es ‘claramente insuficiente’ respecto a las indemnizaciones por despido, ya que “siguen siendo las mismas” que en la oferta anterior (entre el 55 y 57 por ciento del salario bruto entre los 55 a 65 años) y se mantiene una homologación “en la que habrá distintos colectivos con distintas condiciones laborales”.
